“No entiendo qué estoy haciendo mal”.
Si esta frase se ha cruzado por tu mente, quiero que sepas algo: no estás sola, y no estás fallando.
El 80% de las familias comete estos errores sin saberlo. No por falta de amor, sino por exceso de información, consejos contradictorios y presión social.
Hoy quiero mostrarte los errores más comunes que impiden que tu hij@ duerma bien. Pero no desde el juicio, sino desde la comprensión y la acción respetuosa.
Error 1: Sobreestimulación antes de dormir
El cerebro de tu bebé necesita bajar revoluciones para poder dormirse. Juguetes ruidosos, luces brillantes o vídeos justo antes de dormir pueden activar su sistema nervioso y dificultar el descanso.
Error 2: Rutinas inconsistentes
Dormir no es solo una necesidad fisiológica, es un hábito aprendido . Si cada noche es distinta, su cuerpo y cerebro no pueden anticipar que es hora de descansar.
Error 3: Exposición a pantallas antes de dormir
Las pantallas emiten luz azul que inhibe la producción de melatonina, la hormona del sueño. Evítalas 1-2 horas antes de dormir.
Error 4: Siestas desorganizadas
Dormir mal de día hace que tu bebé llegue sobrecansado a la noche, lo que paradójicamente lo hace dormir peor. Ajustar horarios y ventanas de sueño es clave.
Error 5: Asociaciones de sueño dependientes
Dormirse siempre en brazos, al pecho o con movimiento puede hacer que el bebé dependa de eso para volver a dormirse en los despertares normales de la noche.
¿Qué puedes hacer sin causar llanto ni romper el vínculo?
• Introducir cambios de forma gradual y predecible.
• Acompañar con tu presencia, voz y contacto físico.
• Validar sus emociones durante el proceso.
• Elegir un enfoque respetuoso y sostenido en el tiempo.